Plata hay
La pelota dejó de rodar en el River Camp. Tras la eliminación en los octavos de final del Torneo Clausura, el plantel inició sus vacaciones y comenzó un período de reflexión interna. El propio Marcelo Gallardo describió el último trimestre como “pésimo”, lo que aceleró una depuración profunda en el equipo.
Con la salida de varios históricos que finalizaron su contrato, en Núñez ya se puso en marcha el “Operativo mercado de pases”, aunque con una realidad distinta: el presupuesto disponible será de 20 millones de dólares. La dirigencia, encabezada por Stefano Di Carlo, cambió su postura respecto de ventanas anteriores y ahora apunta a una búsqueda puntual, sin grandes erogaciones.
El contexto deportivo y económico influye en este giro. River podría quedar afuera de la Copa Libertadores 2026 si Boca no se consagra campeón, un escenario que condicionaría aún más las finanzas. Por eso, el plan base es claro: reforzar, pero sin “tirar la casa por la ventana”.
Los puestos a reforzar
River buscará incorporar un lateral izquierdo, un volante central, un mediapunta y un delantero. La planificación no variará incluso si el club logra clasificar a la fase inicial de la Libertadores.
Con estos objetivos definidos, ya comenzaron a aparecer nombres en el radar. El apuntado principal en ataque es Luciano Gondou, actualmente en el Zenit de Rusia. El Millonario ya abrió negociaciones con una oferta inicial por un préstamo con opción u obligación de compra, aunque todavía no hubo avances. El delantero dio el visto bueno, y River espera la respuesta de los rusos.
Para la posición de mediapunta surgen dos alternativas. La primera es el posible regreso de Claudio Echeverri, liberado por el Bayer Leverkusen, aunque la operación depende de que el Manchester City, dueño de su pase, lo ceda a préstamo a Argentina. La otra opción es Gianluca Prestianni, ex Vélez y actualmente en Benfica.
Con un presupuesto ajustado y múltiples necesidades, el mercado de enero será clave para definir el rumbo del nuevo River de Gallardo.
